Educación
La escuela de Campana donde los chicos ya aprenden en “las aulas del futuro” siguiendo un innovador método holandés
El diario argentino La Nación publicó en nota de tapa de su revista semanal un extenso artículo sobre la Escuela Técnica Roberto Rocca (ETRR), como caso de espacios educativos que generan transformación en la educación. Con testimonios de la diseñadora internacional Rosan Bosch, y los directivos de la ETRR Ludovico Grillo y Mariana Albarracín, se abordan el modelo de Aprendizaje Basado en Proyectos y el rediseño integral de los espacios educativos, entre otros temas.
Imperdible. Un artículo que vale la pena leer y releer para entender hacia dónde va el modelo educativo que propone la Escuela Técnica Roberto Rocca, donde las y los estudiantes están en el centro del proceso de aprendizaje, los docentes son capacitados y evaluados para acompañarlos, y los distintos espacios incentivan su autonomía y el desarrollo de sus capacidades.
LA NACIÓN Revista publicó, en su segunda edición de agosto, un artículo de tapa sobre la Escuela Técnica Roberto Rocca y el revamping de sus espacios para fomentar el desarrollo de las habilidades del siglo XXI, con despliegue fotográfico de los espacios renovados y los alumnos y alumnas de la escuela. Para ello, en una visita a la ETRR dialogaron con Rosan Bosch, directora del estudio dinamarqués que estuvo a cargo del rediseño de la arquitectura de la Escuela, y con los directivos Ludovico Grillo y Mariana Albarracín.
“La mayoría de las escuelas son edificios pensados para el control, pero hoy sabemos que se aprende a través de la experimentación, cuando se está motivado y en colaboración con otros. Cuando el alumno o alumna está en el centro del diseño y la arquitectura de los espacios educativos, se siente habilitado a diseñar junto a sus pares y docentes su propio viaje de aprendizaje dentro de la escuela”, comienza explicando Rosan Bosch.
Los espacios comunes, con mesas, sillones y puffs de colaboración, son también de concentración o descanso, según la necesidad.
Por su parte, Ludovico Grillo, señala que el diseño y la arquitectura de los espacios potencia el Aprendizaje Basado en Proyectos, modelo educativo que la escuela comenzó a trabajar desde 2017. “Se trata de una metodología activa que les permite a los y las estudiantes adquirir conocimientos y competencias mediante la elaboración de proyectos que dan respuesta a problemas de la vida real. Sin embargo, la digitalización del sistema de enseñanza motivada por la pandemia marcó un antes y un después. Cuando regresamos a un esquema de cursada presencial, reorganizamos la currícula para canalizar nuevas curiosidades y aptitudes que el alumnado traía desde casa. Comprendimos que íbamos a necesitar reformar las aulas y los espacios comunes, migrando a un diseño que favorezca la innovación, la autonomía y el trabajo colaborativo”, detalla Grillo.
Tal como se expresa en el artículo, el modelo educativo de la ETRR pone a las y los estudiantes en el centro del aprendizaje y potencia su autonomía. Para ello es necesario ofrecerles espacios mediante el diseño que los ayuden a motivarse.
“Se trata de maximizar la capacidad de aprendizaje, ofreciéndoles distintos escenarios para inspirarse, ya que cada persona se motiva de un modo diferente. Si somos capaces de descubrir cuál es la manera que mejor nos funciona para aprender, nos servirá también para el futuro y para todos esos aprendizajes que debemos ir haciendo en la vida”, afirma Bosch."
El nuevo diseño potencia el Aprendizaje Basado en Proyectos, modelo que la ETRR promueve desde 2017.
Luego, se aborda el rediseño de la ETRR, organizado a través de áreas de aprendizaje (nodos) para fomentar el trabajo multidisciplinario y por proyectos: Innovación tecnológica; Salud y movimiento; Naturaleza y sostenibilidad; Pensar global-Actuar local.
Mariana Albarracín, la vicedirectora, señala que son los chicos y chicas de la escuela quienes más rápidamente se apropian de los nuevos espacios y exploran las oportunidades que estos entornos les ofrecen para aprender. “Por ejemplo, los espacios de aprendizaje autónomo permitieron a dos alumnos de tercer y cuarto año crear y poner a prueba un motor de cohete experimental. En los proyectos, los chicos pusieron en juego conocimientos en diseño mecánico, física y química, más conceptos de termodinámica que adquirieron sumándose a la cursada de la materia que tienen los estudiantes de años superiores. También fue clave el apoyo de docentes fuera de la currícula habitual”.
Referentes educativos del debate “educación para el trabajo” aportan también su mirada sobre la relevancia de los espacios educativos en la transformación de la pedagogía. Nada menos que Melina Furman, doctora en Educación e Investigadora del Conicet; Mariana Maggio, directora de la Maestría en Tecnología Educativa de la Universidad de Buenos Aires y escritora, o el mismísimo ex jugador de la NBA, Pepe Sánchez, que trabajó con la diseñadora Rosan Bosch en ideas que unen el deporte y el diseño, le dan color y opinión a la nota “Las Aulas del Futuro”.
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